Capítulo 33: El Pequeño Fluffy
La Bestia Feroz estaba preparándose, llevaba semanas estando atada con esas gruesas cadenas. Y poder sentir la libertad nuevamente, después de tanto tiempo, le hacía querer asesinar humanos y probar su sabrosa carne.
El viejo que la capturó le había dicho que si lograba vencer a todos hoy, podría ganar su libertad en un futuro. Por supuesto que no podía responderle pero eso no significaba que no entendiera sus intenciones. Todas las bestias del rango Feroz tenían cierta inteligencia, algunas más que otras.
Miró a la derecha, y vio un grupo de tres humanos con actitudes dominantes. Tenían túnicas amarillas y miradas desafiantes, claramente no serían fáciles de vencer.
Luego miró a la izquierda, y fijo su vista en otros dos grupos de personas.
Aunque no eran tan imponentes como el primero, seguían siendo un desafío.
Uno tenía tres personas, y a pesar que lucían algo asustados seguían superándolo en número.
El otro solo era un dúo, pero se veían bastantes seguros de sí mismo. Además estaban cerca del grupo de tres, por lo cual atacarlos en esa zona podría acabar mal para él sí ambos grupos decidieran ayudarse entre sí.
Por último se centró en el medio de la arena y vio a un pequeño mocoso que se encontraba meditando tranquilamente dentro de un círculo dibujado por él mismo. Esto sorprendió a la Bestia Feroz, a pesar que no tenía una inteligencia tan alta como un humano podía intuir que algo estaba mal con este mocoso.
Pero a pesar de eso, sus opciones eran claras.
Podría enfrentar a 3 poderosos guerreros a la derecha, a otros 5 guerreros a la izquierda o a un mocoso que meditaba tranquilamente con los ojos cerrados en el medio de la arena.
Decidió ir por el camino que considero más seguro, y se acercó lentamente hacia Ryou.
En un principio, lo asechó a una distancia segura. La bestia estaba analizando a su oponente e intentando averiguar que estaba mal con este joven, que claramente no la puso en sus ojos en lo más mínimo.
Al llegar a la distancia de 10 metros, el joven seguía meditando tranquilamente como si nada pasara.
La bestia estaba confundida, y sus instintos primitivos le gritaban que cambiara de objetivo por alguna razón. Pero sus otras opciones no eran mejores. Así que ignoró sus instintos y abriendo su boca, que mostraba unos filosos dientes, cargó hacia adelante con un gran salto.
Ryou, a pesar de estar meditando con los ojos cerrados, en realidad ya había preparado de antemano el terreno para poder enfrentar este desenlace. Debajo de donde estaba sentado, había dibujado en la arena algunos sellos defensivos que contenían una gran energía. Estos grafitis estaban ocultos sobre sí mismo, por lo cual no habían sido notados por el resto.
Algunas voces inquietas, que miraban la escena, se escuchaban desde los picos:
“El muchacho esta tan asustado que ni siquiera puede moverse”
“Será su fin, es una pena perder un genio de ese calibre”
“Quizás superar la primera etapa de esa forma fue tan solo suerte”
Pero cuando la Bestia Feroz estaba por alcanzar a Ryou, él apoyó su mano en el suelo y murmuró algunas palabras.
Una poderosa corriente de aire emergió en forma ascendente desde el círculo que dibujo alrededor suyo previamente, formando así una barrera invisible de viento.
Este viento era muy potente, lo suficiente para rechazar con fuerza a la Bestia Feroz. La bestia pareció haberse estrellado contra una dura pared y rebotó aterrizando a 15 metros de distancia.
Aunque no había recibido ningún daño grave, la bestia pudo detectar el peligro al instante. Ahora si estaba seguro que el joven no era simple.
Analizando la situación, pensó en cambiar su objetivo y apartó su mirada de Ryou. Pero tan solo un instante después, se arrepintió enormemente de haber atacado al joven que meditaba solo.
“Si crees que puedes marcharte luego de haberme atacado con intención asesina estas equivocado”
“En este momento tienes dos opciones…” continuo diciendo Ryou con calma, pero un brillo despiadado en sus ojos estremeció a la bestia.
“En la primera, te sometes a mi voluntad y te ayudo a derrotar a todos los demás en la arena. Y al acabar el día, te permitiré convertirte en mi montura”
“En la segunda, iré hacia donde estas ahora y te arrancaré tus preciosos cuernos. Luego te convertiré en un estofado ¡Y te comeré sazonado con pimienta esta noche!”
“¡Escoge!”
Los genios de las otras tribus se miraron con incredulidad pensando en todo tipo de cosas.
Algunos de ellos comentaron:
“¿De verdad cree que la bestia puede entenderlo?”
“Incluso aunque ese fuese el caso, una bestia salvaje jamás haría pareja con un humano”
“¡Además la está amenazando! ¿Qué nivel de imprudencia es este?”
Liang Feng también se bufó:
“¡Idiota! Hoy serás la comida de esa bestia”
Pero la bestia no era estúpida.
En el desierto, había una antigua creencia que decía que las bestias de rango Feroz de gran tamaño eran muy poderosas. Mientras que las de menor tamaño, eran extremadamente inteligentes. Pero eso no significaba que no fueran poderosas también.
En este caso, esa era una realidad absoluta. La bestia había podido sentir en primera mano la presión que ejerció Ryou con su extraña técnica antes.
Además la fría mirada y el aura asesina de Ryou, ponían en total alerta todos sus instintos primitivos. Así que supo de inmediato que el joven frente suyo no estaba bromeando.
Para la bestia, este joven era como un demonio malvado. En su mirada pudo notar que ya lo había cortado en trozos y planeaba prepararlo a fuego lento.
Sin pensarlo más, se acercó lentamente y agachó la cabeza frente a Ryou de forma sumisa.
La multitud estaba atónita.
¿Qué clase de situación ridícula era esta?
Se decía que para domar una Bestia Feroz, se necesitaba superar a esta en poder por al menos cuatro niveles de cultivo enteros. Y además requería bastante tiempo hacerlo.
Pero ahora ¿Esta bestia había reconocido a Ryou como su amo al instante?
“¡Imposible!” Chilló Liang Feng.
Ryou ignoró las expresiones de la multitud, y se acercó a la bestia.
Extendió su mano y acariciando su cabeza, sentenció:
“A partir de ahora te llamaré Fluffy”
Los demás juniors que miraban la situación querían vomitar sangre al escuchar esto.
“¿Fluffy? Este mocoso se atrevió a nombrarlo, como si fuera un pequeño conejito amistoso” Pensó Liang Feng con incredulidad, la situación ya había escapado de toda lógica hace tiempo.
Ryou desenvaino su arma de calidad intermedia, el sable de 100 cm que Suki Tora le entregó, y se subió al lomo de Fluffy, ante la incrédula mirada de todos los presentes. Luego declaró:
“Los que salgan ahora de la arena, tan solo perderán la prueba. Mientras que el resto, además de la prueba, perderá algunas extremidades y quizás mueran. ¡Tienen 10 segundos para decidir!”
La multitud estaba aturdida, no se atrevían a creer lo que veían sus ojos. Este joven no solo fue capaz de domar una Bestia Feroz al instante, como si fuera un lindo perrito, además no puso a nadie en sus ojos, incluyendo a los genios de las grandes tribus.
“¡Arrogante al extremo!” Gritó con odio Wang Wei, que a pesar de que no tenía ningún problema con Ryou hasta ese momento, se sintió sumamente menospreciado por él.
Desde su punto de vista las palabras de Ryou eran, indirectamente, un insulto para toda la Gran Tribu Plumas Sagradas; ya que siendo Wang Wei su junior número 1 había sido menospreciado por Ryou igualmente. Esto lo enfureció.
A pesar de la advertencia, el tiempo pasó y nadie salió de la arena.
Liang Feng, que en este momento odiaba a Ryou hasta la muerte, apretó sus puños, y dijo:
“¡Eres realmente despreciable! Aliándote con la bestia, estas rompiendo las reglas de la prueba. Además te atreves a desenfundar tu arma cuando nuestro Primer Anciano, Liang Ho, fue tan amable de explicar que debíamos usar solo nuestros puños hace minutos atrás”
Algunas personas en la multitud comentaron brevemente sobre esto, lo que decía Liang Feng sonaba razonable.
Ryou lo miró con cara de quien ve a un retrasado sin remedio, y le respondió burlonamente:
“Quizás el joven maestro Liang Feng tenga algunos problemas de comprensión para entender bien las cosas cuando se las explican… Pero como soy una persona muy amable, se lo explicaré lentamente para que incluso alguien como usted pueda entenderlo”
Hizo una breve pausa, y continúo:
“Lo que Liang Ho dijo fue que debíamos derrotar a la Bestia Feroz usando solo nuestros puños. No mencionó nada sobre no poder luchar contra otros participantes usando armas, ni tampoco de no poder aliarse con la bestia momentáneamente durante la prueba”
Las personas en los picos asintieron en señal de aprobación, Ryou tenía razón, ya que nada de eso había sido aclarado por el Primer Anciano.
“¡Estas cortejando a la muerte!” Chilló Liang Feng con odio, que se sentía suprimido y humillado por el joven de la tribu Roca Ardiente. Pero Ryou lo ignoró, y viendo que nadie siguió su consejo de salir de la arena, se preparó para atacar de inmediato.
“Hoy entenderán por qué no deben despreciar la amabilidad de uno cuando se les da un buen consejo gratis” Comentó Ryou, con una sonrisa fría.
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