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miércoles, 13 de diciembre de 2017

DC - Capitulo 87: Hermanos



Capítulo 87: Hermanos

Ryou sabía que no podía marcharse mientras el Joven de Oro estuviera inconsciente. En un lugar tan peligroso como este, sería lo mismo que dejarlo morir. Por esta razón decidió aprovechar el tiempo para limpiar el área y cultivar.

Aunque había derrotado fácilmente a los hermanos Nergui, en realidad ellos tenían el mismo nivel que él.

“Debo romper en el nivel 4 de Guerrero Espiritual” Pensó Ryou mientras meditaba para calmar su conciencia.

Él sabía que la principal razón por la cual pudo tratar fácilmente con Nergui Shinjo fue gracias a su técnica de cultivo del rango Imperial, Deidad Suprema.

Deidad Suprema era la más poderosa técnica de cultivo que Ryou conocía por debajo de las del rango Sagradas. De hecho sería más correcto decir que era la más poderosa que podría cultivar de forma segura en el continente Tamri. Pero los recursos de cultivo necesarios para progresar con esta técnica eran inmensos.

Las técnicas de cultivo se dividían en Mortal, Tierra, Cielo, Santa, Demoniaca, Imperial y Sagrada. Esta última era casi imposible de cultivar en el mundo mortal, por lo cual Ryou debió dejarlas ir y enfocarse en la segunda mejor opción que conocía.

La técnica Deidad Suprema le permitía simular un poder de dos o tres niveles de cultivo por encima del real.

Pero nada bueno venía sin algo malo. Así como el Yang no existiría sin el Yin. A cambio de semejante ventaja la técnica requería una anormal cantidad de recursos para progresar.

En sus años en reclusión solitaria, Ryou refinó una buena cantidad de los recursos del tesoro de Sao Feng, pero todo eso solo sirvió reparar su Poder Espiritual y subir algunos pocos niveles de cultivo.

Luego de regresar a la tribu Roca Ardiente también continuó refinando algunos recursos del lugar, como Reliquias de Bestia Feroz, pero casi no tenían ningún efecto en él. Esto se debía a dos razones, la primera porque necesitaba una monstruosa cantidad de recursos para progresar y la segunda porque su cuerpo ya había recibido demasiadas reliquias de este tipo en los últimos años, generando una resistencia natural a los mismos.

Este tema era un dolor de cabeza para Ryou que necesitaba nuevos tipos de recursos de cultivo para poder seguir desarrollándose. También fue la razón principal por la cual decidió dejar el Gran Desierto Oscuro.

Ryou tenía en su poder el Anillo Escarlata de Orión, con el cual podría refinar cualquier recurso rápidamente. Lo cierto era que tardaba más en cosechar y absorber la energía que en refinarla. Esto sonaría absurdo para cualquier otra persona, pero en el caso de Ryou sucedía porque tenía este anillo del rango Divino y además debía comprimir la energía refinada por este objeto en diversas capas, antes de poder convertirla en uno con él mismo, debido a que se lo exigía su poderoso método de cultivo.

Mientras los genios normales tardarían uno o dos meses en refinar una reliquia, Ryou lo haría en tan solo unas pocas horas.

Después de calmar su conciencia y entrar en un estado de serenidad; Ryou tomó la reliquia hecha con los huesos de la bestia Demoniaca y comenzó a meditar, mientras su Anillo Escarlata de Orión brillaba con intensidad.

Él previamente estaba en el Pico del nivel 3. Por lo cual no le fue difícil después de un breve tiempo de meditación romper en el nivel 4 de Guerrero Espiritual. Incluso llegó hasta el máximo de la etapa Base, casi llegando hasta la etapa Media, de ese nivel.

“Como pensaba, refinar nuevas reliquias es mucho más efectivo” Pensó Ryou con satisfacción.

Unas 10 reliquias de bestia Feroz juntas podrían no generarle tan buen efecto como una sola reliquia hecha con los huesos de una bestia Demoniaca. Y todavía tenía la reliquia manufacturada con su Dantian, la cual era mucho más efectiva.

“A este ritmo podré romper en el rango de Maestro Espiritual muy pronto” Pensó Ryou, mientras buscaba en su bolsa interespacial su otra reliquia. Pero cuando estaba por comenzar a refinarla, el Joven de Oro se despertó.

“¿Qué ha pasado?”

“¿Dónde están los hermanos Nergui?”

“¿Cuántos días han pasado?” Preguntó, sucesivamente, el desconcertado joven.

Sus heridas habían sanado mágicamente y el veneno que le afligía ya no afectaba su sistema inmunológico. Además el lugar lucía bastante limpio, muy distinto al escenario de la feroz batalla que vivió antes. Todo esto le dio la falsa sensación de que había pasado bastante tiempo desde que calló inconsciente.

Pero la realidad era que Ryou había cuidado de sus heridas usando medicinas de gran calidad, lo cual hizo que sanaran muy rápido. Y el lugar lucía limpio porque enterró todos los cadáveres y aseó la zona, para poder meditar con más tranquilidad.

“Relájate, todo está bien. Solo han pasado algunas horas y los hermanos Nergui ya se han marchado lejos”

El Joven de Oro recuperó la compostura y palmó su bolsa interespacial, parecía estar sorprendido al ver que todas sus cosas aún estaban ahí.

“¿Estuve inconsciente durante horas y no me falta nada?” Pensó con incredulidad. Era raro que una persona de la cual no sabía nada lo ayudase, y además no saquee sus pertenencias personales. Ese grado de moral y ética lo hizo maravillarse. Sobre todo porque sabía que sus riquezas no eran poca cosa.

A decir verdad en el mundo de cultivación era completamente normal aprovechar las oportunidades como esta y robar los recursos de otros. Sobre todo en esta situación y en este lugar. Al estar inconsciente no tendría forma de rastrear al culpable. E incluso si le saqueaban sus pertenencias pero le perdonaban la vida, sería motivo suficiente para sentirse agradecido.

Además era un rico conde que poseía incontables tesoros personales que harían que la mayoría de los cultivadores babeen de envidia. Por lo tanto se sorprendió gratamente cuando descubrió lo magnánimo que fue este joven frente a él, al respetarle su vida y sus pertenencias.

Así que irguiéndose lentamente, se presentó:

“Mi nombre es Chang Jie, aunque todos me llaman Jov…”

“Si lo sé, Joven de Oro o Conde de Oro, lo que sea… Soy Ryou y me alegro que estés bien” Interrumpió despreocupadamente, con una ligera sonrisa.

Chang Jie se sorprendió, era la primera vez en toda su vida que alguien lo trataba con tan poca formalidad. ¡Después de todo era un joven genio y un poderoso conde! Pero no se molestó, de hecho se sintió más curioso sobre Ryou. ¿Quién era este extraño joven que lo había salvado?

Él sabía que había quedado a merced de los hermanos Nergui, quienes eran cultivadores del nivel 3 del rango Guerrero Espiritual, por esta razón estaba impresionado con el hecho de que Ryou lo haya rescatado por sí solo. No sabía cómo logró semejante hazaña pero estaba agradablemente sorprendido.

“No sé cómo lo lograste, pero debo darte las gracias por salvarme” Expresó con sinceridad, ahuecando sus manos, el Joven de Oro.

Ryou asintió con la cabeza sin pedir nada a cambio.

Esto llamó la atención de Chang Jie, la mayoría de las personas buscarían recibir una jugosa retribución luego de salvar a una persona importante de una muerte segura, era algo perfectamente normal hasta para los caballeros de gran nobleza. Pero este joven no pidió nada y de hecho parecía totalmente desinteresado con respecto a ese tema.

“Valoro mi vida y hoy la hubiera perdido de no ser por tu ayuda”

“Dime que quieres y te lo concederé, siempre en cuando este dentro de mis posibilidades” Dijo con franqueza Chang Jie, su mirada estaba llena de firmeza y resolución. No eran simples palabras vacías, era lo que realmente reflejaba su noble alma.

“No te preocupes por eso, ya tomé lo que necesitaba de la bestia Demoniaca que mataste. Este pago será suficiente para mi” Explicó Ryou con calma, mostrando la reliquia de la bestia Demoniaca que el conde y sus hombres mataron.

Chang Jie se sorprendió enormemente al ver esto. Si realmente habían pasado solo algunas horas ¿Cómo pudo haber producido una reliquia Demoniaca en este corto periodo de tiempo? ¡Tendría que ser un completo genio hacedor de reliquias para lograr semejante hazaña!

“Aun así te debo mucho y si en un futuro necesitas algo de mí no dudes en hacérmelo saber” Dijo Chang Jie con determinación. Y luego comenzó a buscar los cuerpos de sus guardias caídos, pero no los encontró.

“Tuve que enterrar a tus hombres. No sabía cuánto tardarías en despertar y el olor a sangre en el aire podría haber atraído a otras poderosas criaturas” Afirmó Ryou con convicción, sonaba totalmente coherente cuando lo decía. Pero era una mentira blanca.

Él jamás le diría que la verdadera razón por la cual hizo una tumba apresurada para los hombres del conde era porque no quería que viese el estado de sus cuerpos. Ryou había robado sus Esencias de Almas con el Amuleto de Tharsis, por lo cual sus cadáveres ahora lucían sospechosamente secos y demacrados.

A pesar de que no eran enemigos, Ryou pensó que sería un desperdicio no utilizar las almas de tantos combatientes poderosos como energía para su amuleto. Por lo cual no pudo resistir la tentación de capturarlas.

Chang Jie suspiró al ver que un enorme montículo de tierra que sobresalía en la distancia. Debajo de esta pequeña montaña se encontraban enterrados los cadáveres de sus leales hombres y los restos de la terrible bestia Demoniaca que habían combatido.

Justo arriba de la pequeña montaña de tierra había una gran roca que tenía algunas palabras grabadas “Aquí Yacen Los Valientes Guerreros del Conde de Oro, Honrados Sean Sus Nombres…”

El conde entendió las supuestas intenciones de Ryou y grabó los nombres de cada uno de sus guardias en la parte inferior de esa misma roca, dándole cierto aspecto heroico a la tumba.

Ryou solo había hecho esto para encubrir los cuerpos de los guardias del conde y de la bestia Demoniaca. No había muchas personas en la actualidad que sepan sobre la absorción de almas pero siempre era mejor no dejar pistas, ni sospechas. Después de todo era un tema tabú y estaba prohibido por el Imperio Zhou.

Además el Conde de Oro no era un cultivador común. Era un verdadero Conde que estaba por debajo del Duque, que a su vez servía al Emperador. Por lo cual el riesgo era mucho mayor. Y el Ducado Kherguita no era un lugar inhóspito como el Gran Desierto Oscuro, aquí debía ser más cuidadoso.

“Salvaste mi vida y además te tomaste la molestia de cavar una tumba para mis hombres. Yo, Chang Jie, te estaré agradecido eternamente por este gesto” Declaró inclinándose respetuosamente ante Ryou. Y, con una brillante sonrisa, agregó:

“¡A partir de hoy te considero como mi hermano!”

Ryou se sorprendió por este gesto, y asintió con una sonrisa.

Este Chang Jie ya le agradaba bastante. Porqué a pesar de que era un poderoso noble, no era presuntuoso, ni fanfarrón, y sabía cómo mostrar gratitud. Además podría serle útil en un futuro.

“¡Haha! Bien que así sea, puedes llamarme hermano mayor a partir de ahora” Soltó Ryou con ligereza.

Chang Jie frunció el ceño. Aunque solo tenía 20 años, estaba seguro de que Ryou era menor que él. Pero no se atrevió a mostrar disconformidad y, con un tono de broma, comentó: “¡No creí que el hermano Ryou sería mayor que yo!”

Ryou se rió, y explicó: “¡Haha! ¡Ante mis ojos, y sin importar la edad, todos mis hermanos serán menores siempre!”

Los dos jóvenes charlaron y bromearon durante un rato, mientras bebieron un dulce y fino licor que Chang Jie sacó de su bolsa interespacial. Después de brindar apropiadamente y conmemorar el nuevo vinculo de hermandad entre los dos, el Joven de Oro declaró:

“Estoy seguro de que habrá otras criaturas poderosas por aquí, y ya que es lo único que necesitas… ¡Te ayudaré a conseguir más reliquias Demoniacas!”

Ryou aceptó con una leve sonrisa, y ambos se marcharon hacia las profundidades más oscuras del denso valle.



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