Capitulo 46 – Las Circunstancias del Nacimiento de Qing Shui (Parte 1)
"Hmm, asi es, ¿Podrías abuelo darme una Divina Píldora Paralizante?"
La solicitud de Qing Shui casi había dado a Qing Luo un ataque al corazón. Emociones complejas surgieron en sus ojos cuando se enfrentó a Qing Shui. "Ya deberías saber sobre los efectos de esta Píldora Divina. Se puede considerar que tienes un potencial brillante y casi ilimitado, por lo que no hay la necesidad de que i pensar en esta píldora en absoluto.”
"Claro, Shui`er, tu abuelo tiene razón. No debes sentirte tentado por el repentino aumento de fuerza y enterrar todo tu potencial futuro.” Qing Yi apenas se recuperó del choque de la petición de Qing Shui, mientras intentaba persuadir a Qing Shui, con la esperanza de cambiar su opinión. Después de todo, fue ella la que le dijo a Qing Shui sobre los efectos de la píldora divina.
Una amargura surgió en el corazón de Qing Shui. ¡Su propio potencial futura era ilimitado, pero actualmente él todavía estaba atascado en el maldito cuello de botella, muy incapaz de hacer un gran avance! Ese paso a través de la puerta de la cuarta Capa celestial, le había evadido durante seis años ... ¡Seis años enteros!
“Entiendo, abuelo, madre, por favor, ten por seguro de que no haré nada que dañe mi potencial.” Qing Shui exhibió una sonrisa tranquilizadora, porque sólo él entendía el desamparo que sentía.
Al escuchar la tranquilidad constante de Qing Shui, tanto Qing Luo como Qing Yi se relajaron ligeramente, pero no habían renunciado repetidamente a recordarle sobre los efectos dañinos de la Divina Píldora Paralizante una y otra vez.
Sin saberlo, Qing Shui ya estaba en el pináculo de la tercera generación, y se había convertido en la estrella deslumbrante del Clan Qing. Todo el mundo, con la excepción de Qing Shui mismo, estaba enamorado de él y sus logros futuros. A Qing Shui no le gustaba ser el centro de atención, exponiendo sus habilidades tan pronto. Después de todo, ¿Podrían compararse realmente sus capacidades actuales con los verdaderamente monstruosos cultivadores del continente? Era sólo que Situ Bu Fan era seriamente demasiado molesto, y por el bien del futuro del Clan Qing, no tenía más remedio que entrar en la arena. Sin embargo, aparte de este Qing Shui tenía otra razón ocultada profundamente en su corazón.
"¡Porque ese condenable Situ Bu Fan es el prometido de Shi Qingzhuang! Sólo pensar en ello me hace sentir incómodo. ¡Si estoy incómodo, entonces, por supuesto, debo dejarlo todo, sólo entonces me sentiría mejor! "Pensando en esto, Qing Shui suavemente suspiró. No sabía por qué exactamente Shi Qingzhuang seguía apareciendo en su mente.
Qing Shui sacudió suavemente la cabeza, tratando de borrar todos los pensamientos que lo distraían. El solo pensar en Situ Bu Fan contaminando la helada belleza era suficiente para enviar sus emociones fuera de control en forma de espiral como olas de ardiente ira, Fuerza y poder. Éstas eran las dos únicas cosas que importaban en Kyushu. Con suficiente fuerza, podía hacer lo que quisiera e incluso arrebatar a los que formaran tu fantasía.
Cuando Qing Shui se perdió en sus pensamientos, Qing Luo sacó una caja sellada y la pasó a Qing Shui. "Puesto que eres tan inflexible sobre esto, el abuelo concederá su deseo ... pero Qing Shui, debes prometerme que nunca, nunca, en ninguna circunstancia consumirás esta píldora. Porque si lo haces, cualquier esperanza de que llegues al reino Xiantian desaparecería en el aire como un soplo de humo. Tu madre y yo esperamos tu progresión futura. Toma esto por lo quieres. "
Incluso en este momento, Qing Luo todavía estaba predicando a Qing Shui sobre los peligros de la divina píldora paralizante. Temía que Qing Shui sintiera que el reino Xiantian era demasiado difícil de alcanzar. Además, si en el futuro hubo poderes que lo provocaron o humillaron, Qing Shui puede, debido a un momento de impulso, consumir la divina píldora paralizante y así, enterrar su potencial.
Después de todo, la ceremonia de la mayoría de edad ya había concluido y Qing Shui ya no era un niño, era oficialmente considerado un hombre adulto. Qing Luo creía que sería capaz de pensar las cosas y tomar las decisiones correctas. No importa qué, un hombre tenía derecho a algunos secretos y como tal, Qing Luo no cuestionó Qing Shui sobre la razón detrás de él queriendo la divina píldora paralizante. " Sigh, si yo supiera que él haría tal petición ..." Qing Luo sacudió su cabeza. Si él supiera que Qing Shui quería la divina píldora paralizante, ¡El no habría sido tan audaz como para sugerir que Qing Shui podría tener cualquier artículo que él quisiera en la tesorería del Clan Qing!
Qing Shui expresó su gratitud después de recibir la caja sellada. Entonces notó que Qing You estaba con un color rojo en la cara, aparentemente queriendo decir algo, pero no había hablado por miedo a interrumpirlos antes.
"Abuelo ........." Después de la palabra resonó, no hubo otro sonido durante un largo momento.
Qing Luo sonrió, su nieto favorito era Qing You desde que era un niño, así, ¿cómo no podía saber en qué estaba pensando Qing You? Cada vez que quería algo, Qing You exhibió esta expresión particular en su rostro. Qing Luo acaba de recibir 6 Frutos de la Fuerza Ardiente de Cien Años, y Qing You tuvo esa expresión en su rostro. ¿Cómo podría Qing Luo no poner dos y dos juntos?
"Hahaha, chico, sé que quieres los Frutos de la Fuerza Ardiente de Cien Años. Darte dos no está fuera de la cuestión, pero debes prometerme que te esforzarás y trabajará s arduamente. Además, después de aumentar tu fuerza, no puedes desafiar a otros para mostrar tu poder. Si quieres desafiar a alguien, desafía a tu hermano Qing Shui ". Después de decir eso, Qing Luo sacó dos de los 6 Frutos de la Fuerza Ardiente de Cien Años y los arrojó a Qing You.
Qing Shui y Qing Yi felizmente vieron como el visiblemente emocionado Qing You mantuvo los frutos. En este momento, se podía ver una mezcla de sorpresa, alegría, sinceridad y gratitud hacia Qing Yi de los ojos de Qing You.
Después, los tres se fueron y Qing You declaró emocionadamente, "Tía, Hermano mayor Qing Shui, voy a ir ahora y aumentar mi fuerza. Los veré después.” Ni siquiera esperó sus respuestas antes de volverse y correr a toda velocidad.
Mirando el fervor exhibido por Qing You, Qing Yi se rio y le dijo a Qing Shui, "Tu pequeño primo Qing You no podrá dormir en paz por unos días. Está demasiado emocionado.”
"Hehe, de hecho. En este mundo orientado hacia la cultivación, ¿Cómo habría algo más alegre que un aumento masivo de la fuerza? " Qing Shui sonrió.
Después de regresar a su residencia, Qing Shui decidió abrir la caja sellada para una mirada a la infame divina píldora paralizante. Dentro de la caja había una pequeña botella blanca del tamaño de una palma. Justo cuando Qing Shui quería abrirlo, fue detenido por Qing Yi.
"No seas imprudentemente al abrirlo Shui`er o la eficacia de la píldora se perdería después del tiempo que toma para preparar una taza de té."
Qing Shui detuvo sus acciones, "Hmm, ¿Es que tiene un aspecto prohibido?" Qing Shui realmente quería saber cómo se veía esta infame píldora.
“No”, dijo Qing Yi, con certeza en su tono.
“Ah olvídalo, ya que no podía mirar a la píldora, también podría empacar. Hoy era el día 15 del mes. Era la fecha para el Festival de las Linternas en su mundo anterior. Juegos como adivinar los enigmas de la linterna no eran populares en el mundo de los nueve continentes, pero el pueblo entero era todavía extremadamente animado, bullicioso con el ruido y la emoción. La gente estaba en todas partes, era como si todos los que vivían en la aldea Qing, estuvieran en las calles dando un paseo, disfrutando del ambiente festivo del Día del Festival de las Linternas.
[NT: Según la tradición, las celebraciones del Año Nuevo chino continúan hasta el Festival de la Linterna, que se celebra el día 15 del primer mes del calendario lunar chino. En el calendario occidental, el Festival de la linterna este año se celebra el 22 de febrero, marcando el final de más de dos semanas de festejos que comenzó el día de Año nuevo chino el 8 de febrero. El Festival de la linterna está tradicionalmente marcado por una exhibición de faroles y otras actividades que rinden reverencia a lo divino, y preparando y comiendo albóndigas pequeñas y redondas, que simbolizan la unión familiar y la felicidad.]
"Madre, está tan animado allá afuera, no nos quedemos encerrados aquí." Qing Shui quería hacer buen uso de su tiempo y disfrutar del ambiente festivo junto con Qing Yi. Después de todo, esas oportunidades eran raras para los dos.
"Okay!" Qing Yi felizmente de acuerdo.
Al final, como durante el nuevo año, Qing Shui y Qing Yi decidieron ir a la Ciudad del Nacimiento del Phoenix. ¡La única diferencia esta vez era que todo el mundo estaba mirando a Qing Shui e incluso un buen número de otros le saludó!
Especialmente para los de las edades más jóvenes. La fuerza en este mundo, era similar a las riquezas en su mundo anterior en términos de status. Qing Shui fue considerado "Extremadamente rico" a los ojos de estos jóvenes.
Lo que hizo a Qing Shui sonreír irónicamente, fue que había un montón de bellezas guapas que, por propia voluntad, fueron a presentarse a Qing Shui, dejándolo nervioso y buscando lugares para esconderse. Esto no podía ser culpado de él, ya que fue su primera experiencia en ambos mundos de su vida para tener chicas hermosas que le pidieron salir.
"Qing Shui, mira, hay una belleza encantadora allí mismo, robándote miradas." Qing Yi alegremente provocó a Qing Shui mientras señalaba su dedo en una dirección determinada.
Después de que Qing Shui siguió el dedo, su mirada aterrizó en una niña de cinco a seis años de edad, cuyos exquisitos rasgos parecían estar tallados en jade, tan hermoso como una muñeca. La niña estaba mirando curiosamente a Qing Shui.
"Oh, una belleza en verdad, pero sólo después de otros 20 años." Qing Shui se rio, mientras sonreía gentilmente a la niña.
Cuando regresaron al Clan Qing, ya se acercaba al atardecer. El sol se puso lentamente, mientras teñía toda la tierra con un color rojizo opaco. Tanto la madre como el hijo charlaban mientras se sentaban en unas sillas colocadas en el patio.
Después de unos momentos, Qing Shui decidió que era hora de obtener las respuestas que Qing Yi le prometió antes.
"Madre, una vez me prometiste esto. ¿Puedes decirme cosas del pasado ahora? ¿Especialmente, acerca de mi padre? "Qing Shui generalmente su suave tono de voz lo endurecido perceptiblemente en algo de acero a pesar de que tratando de enmascararlo.
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