DMWG - Capítulo 713 – Las Puntas de Dos Agujas Se Enfrentan

Capítulo 713 – Las Puntas de Dos Agujas Se Enfrentan

"Wah..."

Una conmoción inundó la atmósfera. La escena dejó estupefactos a todos. Era demasiado cruel y audaz. El anciano de la familia Tan murió sin poder mover la ceja, no estaba exento del castigo en absoluto. Buscando a través de todo el Dominio Misterioso, la única persona que tenía tanta audacia de matar a un anciano de la familia Tan sin una pizca de vacilación solo sería Jiang Chen.

No obstante, la escena no fue demasiado impactante para aquellos que habían ingresado a la Montaña de la Muerte. En sus corazones, Jiang Chen les daba la impresión de ser un dios de la guerra. No había nada que no se atreviera a hacer. En la Montaña de la Muerte, los líderes de las tres potencias principales murieron bajo sus manos. Además, ellos podían recordar claramente la hora antes de entrar a la Montaña de la Muerte. Jiang Chen había matado a los ancianos del Palacio de la Libertad y había refutado al Rey de la Libertad en público, faltándole el respeto total, como si no pusiera al Rey de la Libertad en sus ojos.

Este incidente infundió miedo a los tres ancianos del Palacio de la Libertad y a los dos ancianos restantes de la Escuela Skyhill. Sus caras se pusieron pálidas de inmediato. Para ellos, el espectáculo era demasiado aterrador. Eran figuras altas, y nunca se habían sentido tan débiles ahora, sintiendo como si Jiang Chen pudiera quitarles la vida en cualquier momento. Estos Emperadores de Combate de Noveno Grado eran más agresivos antes de esto, pero ahora, ni siquiera se atrevían a tirarse un pedo debido al temor de despertar la insatisfacción de Jiang Chen, haciendo que quisiera matarlos.

Jiang Chen era demasiado brutal. Había despertado el miedo en sus corazones. Ni siquiera se atrevían a intimidar a Jiang Chen usando su identidad porque era ineficaz.

Además de ellos, Hua Gu Yi y los dos hermanos Feng Yun también fueron asustados hasta la muerte. Durante el tiempo que habían estado en la Secta Nebulosa, esta era la primera vez que habían sido testigos de un discípulo tan dominante. Él también era una persona muy recta. Las condiciones miserables de Tan Zhi Hao y Tan Lang habían desatado su ira. La muerte del anciano fue en realidad el resultado de sus propias acciones.

Los tres ancianos de la Religión Diablo Oscura se miraron el uno al otro, no pudieron evitar asentir al mismo tiempo. Aunque este Jiang Chen era un discípulo de una secta recta, sus acciones eran casi iguales a la Religión Diablo Oscura. Mataría cuando quisiera, decisivo y nunca temeroso. Una manera tan intimidante era de su agrado y los hizo admirarlo aún más. Ellos no pudieron evitar estar en secreto de acuerdo en que el amigo de su joven maestro era realmente inusual.

"Jiang Chen, tú... Maniático! Has matado a un anciano!"

Uno de los ancianos que fue contenido por Jiang Chen había sufrido tanto miedo que su alma se estremeció, su voz tembló intensamente.

"Silencio! Crees que no los enviaré inmediatamente al infierno? Para que ustedes tres puedan reunirse de nuevo?

Jiang Chen exclamó fríamente. El anciano cerró la boca rápidamente. Ni siquiera se atrevió a enfrentar a Jiang Chen en absoluto.

"Haha…"

Tan Zhi Hao se rió de repente después de ver esta situación. Tenía solo dieciséis años. Se suponía que tenía un futuro brillante y largo esperándole, pero debido a su terquedad para encontrarse con su abuelo, lo había destruido todo. Ahora, ya se había convertido en una persona discapacitada. Qué sueños todavía quedaban para él?

Como miembro de la familia Tan, cuando vio morir al anciano de su familia, no solo no estaba triste, sino que se sintió extremadamente contento. Su estado de ánimo actual era el mismo que cuando fue encarcelado en la Cárcel del Infierno Congelante. Su apego emocional por la familia Tan ya se había disipado. Solo podía ver la lucha de la familia Tan, ya sea abierta o secretamente.

"Ah Lang, Ah Hao, vengan aquí".

Dijo Jiang Chen.

Tan Zhi Hao y Tan Lang se acercaron a Jiang Chen. Sus ojos estaban llenos de gratitud. Se habían sentido abrumados por la desesperación durante mucho tiempo. La idea de encontrarse con él de nuevo definitivamente no cruzó sus mentes.

"Quién es el que paralizo sus meridianos?"

Dijo Jiang Chen, aunque en un tono muy frío.

Cuando sus palabras salieron, los discípulos de la familia Tan se pusieron pálidos. También había incomodidad y miedo en sus caras.

"Hermano Jiang, olvídate de eso".

Tan Zhi Hao negó con la cabeza. Ya no quería tener ninguna conexión con la familia Tan.

"Olvídate una mierda, nunca puede ser olvidado. Obtendré venganza".

Tan Lang estalló. No era Tan Zhi Hao y definitivamente no era miembro de la familia Tan. Su apego emocional por la familia Tan era nulo. Había sido torturado desde que entró en la familia Tan. Cómo podría dejar ir este asunto?

Tan Lang escaneó el grupo de la familia Tan. Con su vista, sería extremadamente fácil encontrar a su enemigo.

"Son esos tres".

Tan Lang señaló a los tres hombres. Parecían muy jóvenes, pero sus rangos no eran altos. El grado más alto entre ellos era un Emperador de Combate de Tercer Grado, los otros dos eran meramente Emperadores de Combate de Segundo Grado. Su expresión facial se puso fea al instante. No pudieron evitar dar un paso atrás. En este punto, ya podían sentir sus muertes. Eso era correcto, era la muerte. Jiang Chen incluso había matado a su anciano, y por no hablar de ellos.

Los tres tenían ganas de vomitar sangre. Nunca pensaron que tal cosa les pasaría. Habían intimidado y humillado a Tan Zhi Hao y Tan Lang antes de esto, sin poner a estas dos personas en sus ojos. Incluso si los golpeaban hasta la muerte, no habrían pensado que estos dos debiluchos realmente estaban relacionados con esta desafortunada estrella, Jiang Chen. Sucedió justo después de la segunda apertura de la Montaña de la Muerte. Ni siquiera tuvieron la oportunidad de escapar.

Jiang Chen ni siquiera dijo una palabra. Su mano arañó el aire y una aterradora jaula roja apareció sobre sus cabezas. Con un tirón de Jiang Chen, sus cuerpos quedaron fuera de su control y fueron arrastrados hacia Tan Lang.

En cuanto a los otros discípulos de la familia Tan, todos temblaban de miedo. Ni siquiera tuvieron el coraje de resistirse.

"Jiang Chen, tú... Qué estás haciendo?"

Un joven entre los tres habló mientras temblaba.

"Qué estoy haciendo? Deberías preguntar qué quiere hacer el con todos ustedes".

Dijo Jiang Chen con frialdad. Había pasado completamente la autoridad a Tan Lang.

"No te preocupes. Nunca los mataría a todos. Solo les dejare probar cómo es ser una persona discapacitada. Pequeño Chen, ayúdame a paralizarlos”.

Tan Lang apretó los dientes y dijo. A veces, dejar que las personas experimenten un sufrimiento peor que la muerte era más tortuoso.

"No, no nos paralices. Ah Hao, admitimos nuestras fallas. Pedimos piedad, por favor... No nos paralices!”

"Sí, Ah Hao, piensa en el hecho de que también somos tus hermanos, déjanos ir...”

Los tres estaban aterrorizados. Solo podían pedir misericordia en este momento, esperando que Tan Zhi Hao fuera blando.

Tan Zhi Hao sonrió amargamente y cerró los ojos. Era asunto de Tan Lang ahora, ya no estaba relacionado con él en absoluto.

"Está bien, los paralizaré".

La palma de Jiang Chen tembló. Tres golpes abruptamente poderosos fueron enviados, golpeando el punto de su Mar Qi. Se escuchó un sonido de 'Ka Cha' antes de que brotara sangre. Su Mar Qi fue destrozado directamente por Jiang Chen.

El Mar Qi era el lugar más importante para un cultivador, se usaba para almacenar Fuerza Yuan. Una vez que el Mar Qi se rompiera, significaría el final de su camino de cultivo. Los tres estaban peores que Tan Zhi Hao y Tan Lang ahora. Ellos simplemente tenían dañados sus meridianos, pero su Mar Qi todavía estaba perfectamente bien, lo que significaba que aún podían almacenar Fuerza Yuan en ellos. En este mundo, había muchas formas de sanar los meridianos. Sin embargo, sanar el Mar Qi? Incluso un Gran Santo no podría hacerlo.

Con las técnicas de Jiang Chen, no era difícil curar las heridas de Tan Zhi Hao y Tan Lang. Si fuera su Mar Qi, incluso como el Más Grande Santo, Jiang Chen no podría sanarlos.

"Argh... Estoy paralizado. Me he convertido en alguien paralizado. Detestable!"

"Mi Mar Qi está destruido, mi Fuerza Yuan se está disipando. No podré cultivar a partir de ahora".

"Por qué pasó esto? Todavía tengo un largo camino por delante. Llegué al Reino Emperador de Combate a una edad muy temprana. Ahora estoy acabado, totalmente acabado".

...... ..

Los tres estaban extremadamente afligidos. El odio y el arrepentimiento estaban en sus corazones. Odiaban la acción cruel de Jiang Chen, pero también lamentaban sus errores de herir a Tan Zhi Hao y Tan Lang, o el evento de hoy no sucedería.

"Eres realmente valiente! Te atreviste a matar a un miembro de la familia Tan? Estás absolutamente enojado”.

En ese momento, un pilar de fuego se elevó al cielo desde lejos. En un abrir y cerrar de ojos, apareció un hombre de mediana edad con una túnica de emperador que llevaba un aura de Santo sin límites y llegó al cielo sobre ellos. Su Qi estaba en la cima. En medio de sus cejas, se proyectaba un aura dominante sin una pizca de ira. Era el patriarca de la familia Tan, Tan Zhen Tian.

Era un poderoso Santo Menor de Cuarto Grado, una figura sin igual de gran reputación y un verdadero señor supremo. Después de ver la llegada de Tan Zhen Tian, ​​los discípulos de la familia Tan encontraron su columna vertebral.

"Patriarca, mata a este chico. Él ha matado al gran anciano, Zhi Bai, e incapacitado a nuestros hermanos”.

Los ancianos que estaban contenidos por Jiang Chen gritaron cuando vieron a Tan Zhen Tian. En su punto de vista, la aparición de Tan Zhen Tian significaba que podrían salvarse ya que Jiang Chen no se atrevería a matarlos delante de Tan Zhen Tian. Incluso si Jiang Chen lo quisiera, no tenía la capacidad para hacerlo.

"Pequeño mocoso, libera a mi gente o de lo contrario te dejaré morir miserablemente".

La mirada de Tan Zhen Tian ardía como una antorcha mientras miraba a Jiang Chen. Esa mirada era suficiente para someter a decenas de miles de cultivadores. Sin embargo, para Jiang Chen, no tenía impacto. Jiang Chen era el Más Grande Santo. Cómo podría temblar ante el Qi de un Santo Menor?

"Jiang Chen, no te preocupes. Ya le informé al maestro en secreto. Llegará aquí en muy poco tiempo”.

Hua Gu Yi le dijo a Jiang Chen usando su Sentido Divino. La situación frente a ellos se había ido de las manos. Ella había adivinado que aparecería el patriarca de la familia Tan, así que informó secretamente a Kidd Nebula sobre la situación.

Cuando su voz se desvaneció, apareció otra poderosa silueta.

"Tan Zhen Tian, ​​crees que puedes matar a la gente de la Secta Nebulosa como lo desees?"

Apareció un hombre de mediana edad con una túnica azul. Su rostro era tan afilado como una espada y sus ojos eran tan fieros como un tigre. Su aura dominante brotaba de su cuerpo. Él era el maestro de la Secta Nebulosa, Kidd Nebula.

Los discípulos y los ancianos de la Secta Nebulosa soltaron un suspiro de alivio después de ver la llegada de Kidd Nebula. Con su presencia, no sería fácil para Tan Zhen Tian matar a Jiang Chen.

"Kidd Nebula, tu discípulo ha tomado muchas vidas de mi familia Tan y todavía tiene cautivo a dos de mis ancianos. Me debes una explicación sobre este asunto”.

Tan Zhen Tian miró a Kidd Nebula con un poderoso Qi.

"Jiang Chen, libéralos a los dos".

Nebula Kidd miró a Jiang Chen.

"Piérdanse."

Jiang Chen aflojó las garras afiladas, liberando a los dos ancianos. El sabía por qué Kidd Nebula quería que los dejara ir. Matar a los dos no ayudaría mucho. Solo volvería loco a Tan Zhen Tian, ​​lo cual era muy desfavorable para su situación actual.

"Crees que todo se resolverá dejando ir a mi gente? Quiero resolver las deudas anteriores. Kidd  Nebula, supongo que no nos convertirás en tu enemigo solo por un discípulo".

Tan Zhen Tian amenazó a Kidd Nebula.

"Tan Zhen Tian, ​​no intentes amenazarme. Seré el primero en oponerme a quien se atreva a tocar a Jiang Chen hoy”.

Kidd Nebula respondió con el mismo tono amenazante. Como maestro de una secta, entregar a su discípulo a otro poder importante era absolutamente vergonzoso.

...

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