Capítulo 65: Tribu Gargoulle
Ryou arrastró su mirada hacia el lugar de donde provenía la voz.
Era un jovencito, de unos 12 años, algo corto de estatura y con rasgos faciales infantiles.
“Esos pescados son míos, yo mismo los capture esta mañana, e iban a ser mi almuerzo y mi cena” Se quejó el pequeño lleno de disgusto.
Ryou lo observó detenidamente y supo de inmediato que había sido su error, este jovencito posiblemente trabajó muy duro durante toda la mañana para poder capturar estos peces y él se los había arrebatado en cuestión de segundos.
“Lo lamento, no sabía que eran tuyos, pero permitirme compensarte” Comentó Ryou mientras sacaba de su bolsa interespacial una moneda de Oro.
En las aldeas del Gran Desierto Oscuro una moneda de Oro era suficiente para comprar enormes cantidades de pescado, por lo cual Ryou intentó ser generoso dadas las circunstancias.
Pero el chico ni siquiera miró la moneda, y con un tono lleno de despreció comentó:
“¿Además de robarme planeas hacerme comer un trozo de metal?”
Claramente no era la reacción que Ryou esperaba, pero entendió de inmediato que este jovencito no tenía ningún uso para el oro aquí. Además seguía siendo su culpa lo sucedido, por lo cual intentó arreglar el asunto nuevamente.
“Entiendo ¿Qué puedo hacer para compensarte?”
El pequeño pareció pensar el asunto durante algunos segundos, y finalmente dijo con un tono orgulloso:
“¡Esta bien! Como has reconocido tu error lo dejaré pasar esta vez, pero si vuelves a comerte mi comida de nuevo prometo hacerte sentir todo mi poder marcial como Guerrero nivel 4 que soy”
Ryou pareció ligeramente sorprendido con esta afirmación y comenzó a analizar al chico rápidamente con sus afilados ojos.
“Es realmente un Guerrero nivel 4, y a su corta edad, para lograr semejante proeza en este inhóspito lugar debe ser un genio sin igual o provenir de una familia acaudalada con abundantes recursos” Pensó Ryou, y luego preguntó:
“¿Y dónde está tu familia?”
El chico parecía algo incómodo ante esa pregunta y, mordiendo sus labios, simplemente se encogió de hombros diciendo:
“¡No tengo! Naufragué en esta isla mientras viajaba con mi abuelo y otra persona más. Mi abuelo murió de un ataque al corazón antes de zarpar y la otra persona se perdió en el mar luego. Desde entonces vivo aquí yo solo”
Él percibió que este pequeño había tenido bastante mala suerte, así que con algo de comprensión le entregó el pescado sobrante y luego los dos jóvenes hablaron hasta el anochecer.
Ryou sintió algo de lastima por el chico, a pesar de que era tan solo un año menor que él, su baja estatura lo hacía ver mucho más pequeño. Además le había contado, sin demasiados detalles, la trágica historia de su familia. Su padre era una persona respetable de una villa que fue atacada por un tirano sin escrúpulos, obligándole a su familia a escapar. Pero en el viaje habían tenido algunos problemas, y finalmente sus dos acompañantes murieron en el camino. Siendo así el último sobreviviente y llegando a esta isla.
En la mañana siguiente, Ryou despertó temprano y explicó:
“Pequeño Cheng, debo irme pronto y continuar con mi viaje ¿Quieres venir conmigo?”
Ryou le llamaba de esta forma en señal de simpatía, obviamente el joven Cheng tenía un apellido pero como creía que todos en su familia habían fallecido ya, decidió dejar de usarlo para siempre y llamarse simplemente por su nombre de pila, Cheng. Él había simpatizado con este joven y su situación por lo cual decidió ayudarlo un poco. Además le llamaba Pequeño Cheng debido a su baja estatura, este apodo parecía mosquear un poco al joven al inicio pero después de un día entero escuchándolo ya se había acostumbrado.
“Entiendo que te diriges hacia la tribu Gargoulle, pero tengo entendido que son un grupo de personas muy extrañas que no aceptan a los forasteros fácilmente” Comentó Cheng dubitativo, que parecía algo reacio a salir de la seguridad de su pequeño campamento, ubicado en la cercanía de la costa.
“Si quieres quedarte aquí no intentaré evitarlo pero la tribu Gargoulle no es tan simple como piensas y no tardaran mucho en encontrarte mientras permanezcas en su isla” Afirmó Ryou con convicción.
Finalmente ambos jóvenes se marcharon hacia el centro de la isla a través de la densa vegetación.
A pesar de que Ryou era quien indicaba el camino, fue Cheng quien estaba por delante, abriendo paso entre la maleza con un machete algo oxidado.
Ryou no sabía si reír o llorar viendo la actitud protectora del pequeño Cheng, pero suponía que este chico realmente pensaba que era mucho más fuerte que él, y que sin su protección estaría perdido.
Mientras caminaban por los altos matorrales, una Serpiente de Fuego se atravesó en su camino. Ryou conocía bien esta serpiente, ya el dueño original de su cuerpo había muerto debido al veneno de la misma, por lo cual estaba listo para interferir cuando Cheng gritó “¡Cuidado!” y con un movimiento rápido le cortó el cuello a la serpiente.
Ryou tuvo que admitir que los reflejos de este joven no estaban nada mal, sobre todo para su corta edad. Además su historia personal le recordó un poco a la suya propia, por lo cual cada vez le agradaba más este tal Cheng.
“Hay que tener cuidado, esta selva es un lugar peligroso, incluso un poderoso Guerrero nivel 4 como yo podría llegar a morir aquí si me distraigo” Explicó el jovencito con aires de un súper guerrero.
Ryou solo sonrió y asintió, por dentro solo pensaba en lo curiosa que era esta situación. Un simple Guerrero nivel 4 protegiendo a la existencia más poderosa en todo el Gran Desierto Oscuro, sin duda raspaba lo bizarro.
Caminaron por la isla durante todo el día, y al finalizar la tarde finalmente vieron los primeros indicios de civilización.
Una atalaya de madera se erigía en la distancia.
Al ver a Ryou y Cheng, el guardián de la atalaya hizo sonar una especie de flauta, y muy pronto los dos jóvenes fueron rodeados por múltiples guerreros. Estas personas tenían la cara pintada y vestían ropas sencillas hechas con pieles de animales y vegetación de la isla. Además de sus miradas insatisfechas, que claramente demostraba que no estaban contentos con su presencia aquí, la otra cosa que tenían en común era que todos portaban una lanza y un arco en sus manos.
El pequeño Cheng se puso tenso y comenzó a retroceder lentamente, pero esto desagradó aún más a estas personas y uno de ellos disparó una flecha, en forma de advertencia, que impactó a centímetros de los pies de Cheng.
Ryou le echó un vistazo a cada uno de ellos y asintió satisfecho.
“Todos son del rango Gran Guerrero, deben ser los 7 protectores de la tribu” Pensó, libre de preocupaciones, con una sonrisa radiante.
Desde su fundación, la tribu Gargoulle tenía la costumbre de que los 7 guerreros más poderosos se conviertan en los protectores de la tribu, esto era considerado un gran honor dentro de la tribu y Ryou conocía este hecho, por lo cual no fue sorprendido por las identidades de estos hombres imponentes.
Finalmente Ryou tomó la iniciativa, y habló en una lengua extraña:
“No queremos problemas, solo buscamos refugio por un tiempo. A cambio pagaremos por su hospitalidad generosamente”
Los protectores se miraron entre sí y el más veterano de ellos respondió:
“Conoces nuestra lengua, es muy raro que un forastero lo haga. Los llevaré a conocer a nuestra Matriarca pero solo si logran superar la prueba de aptitud”
Ryou sonrió, imperturbable, y comentó: “Conozco sobre ese pequeño asunto, y no hay ningún problema, puedes realizar tu prueba ahora mismo”
El veterano protector lucía sorprendido por la confianza que mostraba su contraparte. Por lo cual les marcó el camino hasta llegar a una pequeña arena de combate, donde varios guerreros estaban entrenando con esmero.
“Cheng, pon atención, debido a las reglas ancestrales de esta tribu solo los fuertes pueden permanecer en su territorio, por lo cual nos harán escoger un oponente entre sus filas y deberás derrotarlo, intenta no equivocarte en tu elección” Explicó Ryou, ante la mirada de un confundido Cheng, que se ya había arrepentido de haber venido a este lugar.
El veterano protector de la tribu comprendió que Ryou estaba bien informado sobre sus costumbres, y le hizo señas para que escoja a su oponente primero.
Los guerreros dentro de la arena habían notado la presencia de forasteros y abandonaron todo lo que hacían para observar el espectáculo, después de todo era sumamente raro que tengan visitantes extranjeros. Además junto a ellos estaban sus superiores, los siete protectores de la tribu, por lo cual se pusieron firmes en señal de respeto.
La elección más obvia para elegir un oponente habría sido cualquiera de los jóvenes guerreros que entrenaban en la arena, pero Ryou quería entrar por la puerta grande y no dudo sobre a quién desafiar.
Levantando lentamente su dedo señaló al veterano protector, ante la incrédula mirada de todos los presentes.
“¡Que joven más loco! No debe tener ansias de permanecer dentro de los territorios de la tribu”
“Quizás solo quiere que le den una paliza”
“¡Desafiar al Gran Protector! ¡Pequeño demente!”
Esos fueron algunos de los comentarios que se escucharon entre la multitud.
A pesar que Cheng no entendía el idioma nativo, pudo ver los rostros llenos de burla de los miembros de esta tribu, pero cuando estaba a punto de aconsejarle a Ryou sobre escoger otro oponente, la pelea ya había terminado.
En un instante; el veterano protector había sido aplanado contra el suelo, como si un yunque de más de 1000kg le cayera encima. Un solo golpe de Ryou había alcanzado para derrotar a este respetable oponente.
La multitud quedó atónita y los que antes se burlaban tenían caras llenas de incredulidad ahora.
Por supuesto que esto estaba dentro de las expectativas de Ryou, después de todo su Gran Protector era solo un Gran Guerrero nivel 3 del montón ¿Cómo podría alguien de ese nivel compararse con Ryou? Un solo Golpe de Energía, la técnica más básica de su método de cultivo, le alcanzó para derrotarlo. Las únicas personas que podrían hacerle frente a Ryou en estos momentos serían del rango Guerrero Espiritual, incluso un Gran Guerrero nivel 5 del pico, igual a él, no sería suficiente para inquietar a Ryou, que conocía técnicas y métodos secretos de rangos superiores.
Los guerreros en entrenamiento se arrodillaron de inmediato. En una sociedad que veneraba el poder más que nada, un poderoso personaje como Ryou sería el ápice de su ideología, alguien digno de veneración y respeto.
Incluso hasta los poderosos protectores bajaron la cabeza ante la mirada de Ryou.
Por otro lado, Cheng miraba lleno de vergüenza, había jugado a hacerse el fuerte durante todo el camino frente a un poderoso Gran Guerrero como Ryou. Si pudiera encontrar un pozo oscuro, sin duda se ocultaría dentro.
El veterano protector se levantó del suelo lentamente, y con algo de sangre en la comisura de su boca, exclamó: “Los llevaré con la Matriarca de inmediato”
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