Capítulo 88: Peligro en todos lados
Originalmente Ryou no quería que alguien se involucrará con su cacería de bestias Demoniacas, y esa fue la principal razón por la cual se separó de Suki Naomi y Long Yinye. Pero negarse a recibir la ayuda desinteresada de su nuevo amigo sería descortés. Además este joven no era débil, ya que su cultivación estaba en el nivel 5 del rango Guerrero Espiritual. Con semejante poder, Ryou no debía preocuparse por su seguridad.
De hecho si no fuera porque Ryou era un experto con cientos de miles de años en conocimientos acumulados, que entrenaba una técnica del rango Imperial como Deidad Suprema, sin duda la situación sería inversa. Cualquier otro genio de la generación joven seguramente sería opacado por este poderoso conde.
Los días transcurrieron rápidamente, y los dos jóvenes combatieron contra cientos de bestias Feroces en su camino pero aún no lograban dar con el paradero de otra bestia Demoniaca.
Chang Jie estaba sorprendido por lo desinteresado que era Ryou con respecto a las reliquias de bestia Feroz. Incluso un noble y rico conde como él le daba cierta importancia a estas reliquias, pero su nuevo amigo ni siquiera se molestaba con estas. Tuvo que insistir varias veces para que Ryou aceptara manufacturar reliquias con los Dantian de las bestias más poderosas que encontraron hasta el momento. Y solo para descubrir que ¡Apenas le tomaba algunos minutos crear una reliquia!
“¿Qué clase de habilidad de creación es esta?” Pensó Chang Jie espantado.
¡Jamás había visto a nadie crear una reliquia de forma tan rápida!
Y además estaba el otro tema… Las reliquias creadas por Ryou lucían blancas y relucientes, con cierto grado de brillo, como si fueran reliquias perfectas que pudieron conservar todo el poder de las criaturas en su interior. No había impurezas, ni desperdicios.
Chang Jie estaba maravillado y sintió que sus horizontes sobre la creación de reliquias se habían expandido en varios niveles.
“El hermano mayor Ryou debe ser un genio hacedor de reliquias del más alto rango” Pensó.
La realidad era que Ryou ni siquiera se estaba esforzando. Él una vez observó por años a alguien que podía crear decenas de reliquias al mismo tiempo en cuestión de segundos, usando este peculiar método. A comparación de ese experto supremo del antaño, lo que estaba haciendo Ryou ahora parecía un juego de niños. Pero a los ojos de Chang Jie, este arte de manufacturación era supremo y sin igual.
Ryou seguía recogiendo Hierbas Espirituales de calidades Media, Alta y algunas pocas de calidad Épica que se encontró en su camino. Estas últimas se escondían muy bien, por lo cual sería imposible encontrarlas sin ser un experto en el tema, que además fuese un Guerrero Espiritual que dominara la técnica de Ser Uno con el Entorno. Por supuesto que Ryou cumplía con todos estos requisitos por lo cual no era algo particularmente difícil para él.
El Joven de Oro no sabía mucho sobre la herbología, ni nada relacionado con plantas, hongos, flores o árboles. Siempre se había enfocado en estudiar los asuntos relacionados con el gobierno y también todo lo vinculado con lo militar. Por lo cual este tema era totalmente desconocido para él, pero a pesar de eso pudo notar que Ryou era un experto en el área, ya que sabía en dónde buscar y como recoger las hierbas fácilmente, sin tener que dañarlas. Anteriormente el conde también había recogido algunas hierbas importantes, pero era solo gracias a la ayuda de uno de sus guardias que era un conocedor en el tema.
Además durante el camino habían enfrentado a diversas criaturas, sin embargo Ryou siempre permanecía calmado y sereno como si nada importante pasara. Aunque Chang Jie no podía ver su nivel de cultivación, supuso que estaba por lo menos a la par de él.
Todas estas cosas le hicieron pensar que en realidad no era tan especial como pensaba.
Siempre lo habían llamado genio supremo y le habían puesto infinidad de apodos raros para mostrar su grandeza, pero la realidad era que su nuevo amigo era un genio insoldable que lo superaba en casi todas las áreas y además era más joven que él.
“Según mis cálculos deberíamos estar llegando al final del valle muy pronto” Comentó Chang Jie.
Ryou asintió, él sabía esto a la perfección. Había estado muchas veces en este lugar mientras era un Vigilante de los Cielos.
Mientras avanzaban a gran velocidad, una serie de hongos gigantes comenzaron a aparecer en el rango de visión de los jóvenes. Estos hongos tenían el tamaño de varias personas juntas y su laminilla superior era de color marrón.
El Joven de Oro se percató de estos hongos primero y, como sabía que Ryou buscaba este tipo de cosas raras relacionadas con la herbología, se dirigió hacia ellos rápidamente.
Había más de 200 de estos enormes hongos, amontonados en un campo pequeño.
Al ingresar al campo observó que había una gran cantidad de huesos de criaturas desparramados por el suelo. También notó un olor intenso y peculiar que conocía muy bien, el olor a la sangre fresca.
“¡Sal de ahí!” Gritó Ryou a la distancia al notar la ubicación de su nuevo amigo.
Chang Jie se alarmó. Debido al tono de voz de Ryou supo de inmediato que había entrado a un lugar extremadamente peligroso.
Pero su reacción fue rápida. Y se disparó hacia el aire, usando los Pasos Lunares, justo antes de ser devorado.
La escena que observó debajo de sus pies lo dejó desconcertado, esos cientos de hongos gigantes ahora lucían muy distintos. Podían caminar con decenas de pequeñas patas y tenían una enorme boca con afilados dientes que podrían triturar a una bestia Feroz en cuestión de segundos.
“¿Qué demonios…?” Musitó desconcertado.
“Son Hongos Falsos de Vermu, estas criaturas son terriblemente viciosas ya que simulan ser hongos gigantes inofensivos pero en realidad son bestias Feroces que se mueven en grandes grupos y devoran a sus presas antes de que detecten el peligro” Explicó Ryou con calma.
Pero sus afilados ojos ya no estaban observando a los hongos en la tierra, algo mucho peor se dirigía hacia ellos por el aire.
“Me temo que deberemos bajar y escapar corriendo hacia aquel bosque” Señaló Ryou mostrando un pequeño bosque que se erguía a la distancia.
Chang Jie pensó que había escuchado mal, y repitió:
“¡¿Bajar?! ¿Te refieres a acercarnos de nuevo a esas horribles cosas?”
“Si, es correcto... ¡Y lo haremos ya mismo!” Exclamó Ryou exasperado, señalando hacia el horizonte.
La cara de Chang Jie se contorsionó al ver lo que se venía hacia ellos.
Además del gasto extra de energía, había otra razón por la cual los Guerreros Espirituales no solían usar los Pasos Lunares, y preferían caminar por el suelo en este lugar, y esa razón se dirigía hacia ellos ahora.
“¡Una bestia Demoniaca voladora!” Gritó Chang Jie con cierto grado de pánico en su voz.
Una enorme criatura de más de 20 metros de largo se acercaba volando a gran velocidad. Tenía plumas blancas y una enorme hilera de dientes que la hacía lucir imponente.
¡El escorpión demoniaco de antes no era nada en comparación de esta cosa!
Los dos jóvenes aterrizaron en el suelo, mientras esquivaban las violentas mordidas de los Hongos Falsos de Vermu.
Con gran agilidad y destreza, los dos lograron salir de la multitud de hongos a salvo. Pero ahora estos estaban enfadados y comenzaron a seguirlos hacia el bosque.
A pesar de que normalmente simulaban ser criaturas inmóviles, en realidad estos hongos se movían bastante rápido. Aunque no podían alcanzarlos, todavía lograban seguirles el paso.
Chang Jie se alegraba interiormente mientras miraba hacia atrás. La distancia entre ellos y los hongos aumentaba con cada segundo. Pero al girar la cabeza se puso pálido.
Frente a ellos la enorme bestia Demoniaca voladora planeaba bajo, con la intención de agarrarlos con sus patas.
El bosque estaba cerca, pero la enorme criatura llegaría ante ellos un poco antes de que logren refugiarse dentro del mismo.
“¡Sigue corriendo recto!” Ordenó Ryou sin detenerse.
Chang Jie frunció el ceño. La bestia estaba delante de ellos, dirigirse directo hacia ella no parecía un plan muy inteligente ¿Pero que más podría hacer? La muerte asechaba adelante y atrás. Además confiaba en el juicio Ryou, así que no dudó y corrió a toda velocidad.
Ryou sacó un arma de su bolsa interespacial y, levantándola hacia el cielo, activó su ataque especial:
“¡Runa Resplandor Brillante!”
El arma brilló con intensidad, cegando completamente a la bestia Demoniaca voladora durante algunos segundos. Parecía que un pequeño sol había nacido dentro del oscuro valle.
Los dos jóvenes lograron superar a la enceguecida bestia, pasando por debajo de sus garras, y llegando hasta la entrada al bosque. Había sido una situación desesperada donde de haber tardado un segundo más habrían sido atrapados ambos.
Detrás de ellos, la enorme criatura voladora ya se había recuperado y ahora tenía a varios hongos entre sus patas, mientras comenzaba mordisquear al primero, para luego ascender a altitudes superiores.
Chang Jie suspiró de alivio. Pero la amenaza no había pasado ¡Ahora los hongos habían detectado el enorme peligro que los asechaba y corrían aterrorizados hacia el bosque también!
“¡Sigue corriendo!” Dijo Ryou adentrándose en el bosque con gran velocidad.
Anteriormente, desde el aire, habían podido observar que este bosque no era muy grande. No era lo suficientemente espacioso para albergar a un ecosistema con muchas criaturas diferentes, pero si para ser el patio de recreo de alguna poderosa bestia demoniaca.
Por esta razón, después de correr durante algunos minutos, Ryou se detuvo y dijo:
“Espera… No tiene sentido seguir adentrándonos en este bosque, los riesgos podrían ser aún mayores que enfrentar a estos hongos…”
“Estoy seguro de que los hongos nos alcanzarán en algunos minutos. Pero hay solo alrededor de 200 de estos y si colocamos algunas trampas por aquí podríamos esperarlos, y derrotarlos fácilmente”
“Además aunque son rápidos, no son muy agiles. Por lo cual será más fácil enfrentarlos en este denso bosque lleno de árboles”
El Joven de Oro asintió en señal de entendimiento, y ambos se pusieron a trabajar.
Ryou improvisó velozmente una matriz defensiva a mediana escala, mientras que Chang Jie colocó algunas trampas adelante, usando los objetos que traía en su bolsa interespacial.
Minutos después, los Hongos Falsos de Vermu llegaron en forma de una enorme oleada de bestias que corría frenéticamente entre los arboles del bosque.
Los que estaban más adelante fueron los primeros en morir al pisar las distintas trampas que colocó Chang Jie. Algunas de sus trampas fueron muy eficaces y otras no surtieron ningún efecto, esto era porque el Joven de Oro puso varias trampas relacionadas con el veneno sin saber que estos hongos eran prácticamente inmunes a la mayoría de los venenos del mundo, por lo cual fueron inútiles. Pero todavía murieron cerca de 40 hongos gracias a las demás trampas que puso.
Al superar esa zona, llegaron hasta la matriz defensiva que colocó Ryou.
Chang Jie estaba sumamente curioso sobre que matriz espiritual podría ser creada en tan solo unos pocos minutos. Desde su punto de vista incluso la matriz más simple era imposible de crear en ese corto periodo de tiempo. Pero en los últimos días había visto a Ryou hacer cosas únicas varias veces, por lo cual no dudaba en que su amigo debía tener algún método para lograrlo.
Cuando todos los hongos entraron al perímetro de la matriz, Ryou la activó.
Por alguna razón la velocidad de los hongos decayó en gran medida e incluso hubo algunos que dejaron de moverse totalmente. Parecían estar sufriendo alguna clase de presión externa que los incapacitaba.
Chang Jie sabía una o dos cosas sobre matrices. Por lo cual sus ojos brillaron al ver este raro espectáculo:
“Imposible… ¿Una matriz de aumento de gravedad? ¡Hasta un experto supremo tardaría varias horas en crear semejante cosa!”
Pero con respecto a este tema, la realidad era que un llamado experto supremo del Ducado Kherguita no era más que un simple junior ante los ojos de Ryou. Además él contaba con la ayuda del Amuleto de Tharsis, que después de asesinar a incontables criaturas durante los últimos días, había absorbido secretamente bastante poder de almas.
Por lo cual crear esta poderosa matriz en tiempo record no fue tan difícil para Ryou, que uso el poder del amuleto para acelerar la creación de la misma, y potenciar su fuerza.
“Estas criaturas normalmente suelen tener el poder de un Gran Guerrero nivel 5 cada una, pero ahora que están bajo los efectos de la matriz son un blanco fácil…”
“¡Es hora de matar!” Sentenció Ryou, y sacó un hermoso arco largo de color blanco.
Este arco estaba hecho con huesos, lo cual era algo bastante infrecuente de ver. Además sus flechas también estaban hechas con el mismo material.
Ryou consiguió esta preciosa arma gracias al tesoro de Sao Feng. Este era su poderoso arco, una de las armas principales del famoso pirata.
El Joven de Oro planeaba sacar su propio arco para ayudar con la matanza, pero se detuvo luego de ver los rápidos disparos de Ryou.
Varias flechas salieron disparadas hacia los hongos con enorme velocidad.
El poder de estas flechas era aterrador, hasta el punto de que el propio Ryou se preguntó si era necesario usar unas flechas tan finas para matar a estas tontas criaturas.
Al impactar una de estas flechas contra un hongo, lo traspasaba fácilmente dejando un enorme hoyo en sus cuerpos. Y luego hacía lo mismo con el hongo que estuviera detrás de este, hasta matar a 4 o 5 juntos, atravesando también varios árboles en el medio. Y si no fuera por la Matriz que aumentaba la fuerza de gravedad, seguramente cada flecha podría matar en cadena al doble de estas bestias.
Los hongos entraron en pánico al ver como caían fácilmente sus compañeros sin poder hacer nada. Debido a la fuerza de gravedad aumentada, apenas podían avanzar y ya era tarde para retroceder. Su final era inminente.
Ryou disparó una flecha tras otra y, en cuestión de minutos, los 160 hongos que quedaban fueron totalmente masacrados por él.
Ryou desactivó la matriz y se acercó a recoger las flechas asesinas. Eran demasiado especiales para perderlas ya que estaban hechas con los huesos de una poderosa bestia Demoniaca del antaño. Además aprovechó el momento para absorber, disimuladamente, parte de las Esencias de Almas de estas criaturas, y así cargar un poco el poder de su Amuleto de Tharsis.
Por otro lado el arco era aún más especial que las flechas, ya que fue creado usando los huesos de un poderoso cultivador que Sao Feng derrotó en el pasado. Esta persona había alcanzado un rango de cultivación muy alto, por lo cual sus huesos eran extremadamente duros, y casi imposibles de moldear. Pero Sao Feng, en uno de sus largos viajes por el océano, había logrado dar con el paradero de un herrero capaz de semejante hazaña y fue esta persona quien creó este poderoso arco, que era considerado como un arma de calidad Alta en el nivel Experto, a tan solo un paso de ser un arma del nivel Maestro.
Chang Jie sonrió con amargura al ver la masacre frente a sus ojos. Antes creyó que había hecho una gran contribución al matar a 40 bestias con sus trampas. Pero Ryou eliminó a las 160 restantes fácilmente. Incluso hasta tuvo que admitir que estaba un poco celoso de la habilidad de arquería de Ryou y de su poderoso arco.
“En todo mi condado no hay ni una sola arma tan poderosa como este arco...”
“¿Qué clase de trasfondo impresionante tiene el hermano Ryou para poseer semejante arma?” Pensó Chang Jie con desconcierto. Su nuevo hermano jurado se volvía cada vez más misterioso para él. Pero la confianza que tenía en Ryou se había incrementado todavía más luego de vivir esta experiencia.
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